CASTILLOS DE L’ALACANTÍ

CASTILLOS DE LA COMARCA DE L’ALACANTÍ (ALICANTE)

01 – CASTILLO DE JIJONA:

Esta fortaleza almohade del siglo XII, aunque existen indicios de ser anterior a la ocupación árabe, también conocida como torre Grossa, se alza sobre una colina de 570 metros de altura, presidiendo la población de Jijona. El conjunto disponía de doble recinto amurallado y de una extensa planta alargada que cubría la parte más inexpugnable de la cima. La torre del homenaje, de planta cuadrada y con más de 15 metros de altura, es su resto más representativo. Además de una buena parte del primer recinto amurallado, se han conservado otras tres torres que lo protegían, denominadas, dos de éstas, Santa Catalina y Atalaya. Uno de los castillos más importantes de la provincia por su privilegiada y estratégica ubicación. Jaime I recuperó el castillo y la ciudad en el año 1.258. En 1.337 Jijona ya era una villa y tenía representación en las cortes valencianas de Pedro II. Además sería este rey quien realizaría importantes reformas y restauraciones en el castillo sobre el año 1.338. Pedro el Cruel lo conquistó en el año 1.364, siendo recuperado más tarde para la corona de Aragón. Durante la Guerra de Sucesión, principios del siglo XVIII, el castillo, que participó muy activamente en la contienda, fue prácticamente destruido. Al finalizar el conflicto, y motivado por la fidelidad demostrada por la villa, el rey Felipe V le otorgó el título de ciudad. Entre otros privilegios se contó con la donación del castillo y sus propiedades al ayuntamiento de la localidad. A partir de ese momento la construcción entró en un periodo de abandono y ruina progresiva.

02 – CASTILLO DE AGOST:

La construcción de esta fortaleza se remonta a los primeros años de la ocupación musulmana. Situado sobre la loma que preside la población de Agost. El castillo sufrió diversas vicisitudes que fueron paulatinamente deteriorándolo. Las últimas referencias escritas datan de finales del siglo XVII, en que la población de Agost se segrega definitivamente del municipio de Alicante, pasando el castillo a ser posesión de los caballeros de Vallebreras, últimos propietarios del mismo, y que dejaron se fuera desmoronando sin hacer tipo alguno de obra para su reconstrucción. En la actualidad ha desaparecido casi en su totalidad, quedando tan solo un lienzo reconstruido toscamente en la zona sureste de la construcción, incluso con almenado.

03 – CASTILLO DE BUSOT:

El Castillo de Busot se alza sobre un cerro situado al norte de la localidad de la que tiene su nombre. La fortaleza es de origen musulmán, y se estima que se construyó al mismo tiempo que se fundó el pueblo, lo que nos remonta al siglo XII. Tras la conquista cristiana de la plaza por el rey Jaime I el Conquistador, en 1.252 se incorporó al término de Alicante por decreto del rey Alfonso X el Sabio cuando este territorio pertenecía al reino de Castilla. Durante el reinado de los Reyes Católicos, el castillo y villa pertenecieron a la familia de nobles de Pedro Martínez de Vera. Con el devenir de los siglos, el castillo fue paulatinamente abandonado por sus dueños, hasta que quedó en ruinas, siendo totalmente inservible para los posteriores avatares de la historia de estas tierras, lo que le supuso no intervenir en los sucesos de relevancia acaecidos con posterioridad, especialmente en la Guerra de Sucesión. Hace pocos años se inició un proyecto de recuperación urgente, restaurando partes esenciales de la fortificación que se encontraban muy dañadas.

04 – CASTILLO DE SAN FERNANDO (ALICANTE):

En la ciudad de Alicante, en la zona del monte Tossal y el cerro de San Francisco, no muy lejos del Castillo de Santa Bárbara se encuentra este castillo. Edificado entre los años 1809 y 1812 con motivo de la Guerra de la Independencia. Su finalidad era la de completar la línea defensiva de la ciudad e impedir un hipotético desembarco francés en la ensenada o un ataque por la zona de San Blas. Se ideó como prisión, pero no se llegó a estrenar como tal porque los franceses no pudieron invadir esta ciudad. Al ser una construcción realizada en tan poco tiempo fue el centro de muchas críticas. Además, al poco tiempo de su uso, la fortaleza comenzó a mostrar deficiencias, creciendo aún más las dudas que existían sobre ella. Actualmente está en situación de abandono y el paraje se ha convertido en un lugar sucio e inseguro. Deberíamos darle a este castillo el reconocimiento que se merece. No es un lugar cualquiera, en las laderas del monte Tossal está la ciudad deportiva de Alicante, además del Conservatorio Superior de Música Óscar Esplá, el instituto 8 de Marzo, el instituto Jorge Juan y la escuela de Hostelería.

05 – CASTILLO DE SANTA BÁRBARA (ALICANTE):

En el centro de la ciudad, sobre el monte Benacantil, mole rocosa de 167 m de altitud lindante con el mar, lo que le confería un enorme valor estratégico ya que desde la misma se divisa toda la bahía de Alicante y sus alrededores terrestres, encontramos este espectacular castillo. Aunque en sus laderas se han encontrado restos de la Edad de Bronce, Ibéricos y de la época romana, la fortaleza pertenece al siglo IX, bajo la dominación musulmana. En 1248, el infante Alfonso de Castilla, el que sería el rey Alfonso X el Sabio, tomó la ciudad a los árabes, un 4 de diciembre, día de Santa Bárbara. De ahí viene el nombre de esta fortaleza. En 1296 pasó a pertenecer a la corona de Aragón y se comienza una remodelación del castillo. Fue bajo el reinado de Felipe II, siglo XVI, cuando se produce la gran reforma de esta construcción. Posteriormente, con los bombardeos de 1691, durante la Guerra de Sucesión, entre los años 1706 y 1709, las acciones militares de la primera república en 1873, etc… afectaron gravemente todo el recinto del castillo. Durante la Guerra Civil Española la fortaleza sirvió para recluir tanto a prisioneros de un bando como del otro y estuvo funcionando como campo de concentración franquista hasta el año 1939. Después, y hasta el año 1963, estuvo en total abandono. A partir de ese año se le hicieron remodelaciones y mejoras y se abrió al público.

Deja una respuesta