2022-03-18 REFUGIOS CANTEROS, SIERRA DE LA MOLA

Refugios Canteros, Sierra de la Mola, en Wikiloc.

Para este desapacible viernes de marzo he optado por una caminata por una pequeña sierra de la comarca del Vinalopó Mitjà, entre las poblaciones de Novelda y Monóvar, la Sierra de la Mola.

A través de la autovía A31, tomo la salida a Novelda, por la carretera CV-8201, y me dirijo por la CV-832 al parking de la Mola, lugar donde se encuentra el Castillo de origen almohade, del siglo XII, y el santuario de Santa María Magdalena, así como la propia sierra y sus refugios canteros.

Desde el aparcamiento me dirijo, en dirección oeste, a la primera de las muchas canteras que hay en el itinerario. Ésta tiene una zona de recreo en su entrada, sólo está permitido su acceso con el permiso del ayuntamiento, tiene una valla que la protege y en su interior está instalada una balsa o charca para el estudio, difusión y recuperación del fartet, un pequeño pez endémico de la península ibérica que se encuentra en peligro de extinción.

El camino me lleva, rodeando la sierra, por distintos de los refugios canteros, más abundantes cuanto más hacia el sur me encamino.

También encuentro a mi paso una vivienda cueva, algo ruinosa pero todavía muy reconocible su función de morada.

Los refugios canteros son construcciones realizadas en piedra seca (técnica que se considera Patrimonio Inmaterial de la Humanidad) y que servían como alojamiento puntual a los canteros de las antiguas explotaciones de piedra caliza “gris Mola” y “magre Mola”, en los siglos XIX y los inicios del XX. 

La visita a estos refugios (son unos 13, repartidos sobre todo por las laderas sur de la sierra) carece de un itinerario bien señalizado, por lo que el acceso a ellos, en algunos momentos, es bastante complicado.

Por toda la zona se intercalan numerosas canteras, a distintas alturas, cuevas, pozas y símbolos, repartidos por el paraje.

Todo ello ha hecho que la caminata, que en sí no era ni larga ni con un gran desnivel, haya sido bastante complicada de realizar. Hasta el punto que, en un momento dado, un traspiés me ha hecho rodar por una torrentera… Nada importante, sólo alguna magulladura y el bastón para tirarlo a la basura.

He podido, por fin, incorporarme a una de las pistas que rodean la sierra, he desistido de buscar más refugios (sólo he encontrado 8 de los 13, además de algunos de los símbolos) y ya he ido a tiro fijo, por la senda que conduce al aparcamiento donde se encuentra el coche.

He llegado al auto y, antes, me he dirigido al castillo y al santuario, una pequeña vuelta por estas dos construcciones y, nuevamente, al vehículo y… regreso a Alicante.

Valoración: 2**

Recomendable: Siempre, pase lo que pase, recomendable siempre. Han sido algo más de 5 kilómetros, con un desnivel de sólo 175 metros, con una dificultad alta, mucho barro, piedras resbaladizas y en una mañana nubosa que la lluvia ha respetado.